Misa Diaria y Lecturas
¿No puede asistir a la Santa Misa? EWTN le ofrece las lecturas del día para permitirle seguir la Misa diaria en su transmisión por televisión. Las lecturas también son ideales para hallar tiempo durante el día para la reflexión espiritual. Escuche, vea o lea desde la comodidad de su hogar. Esta página incluye las lecturas del día y videos en línea, un recurso para todo el que desee vivir la vida de fe que agrada a nuestro Señor.
Miércoles 27 de noviembre de 2019
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El Padre Joseph Mary Wolfe dice: «Hemos integrado este pequeño cuadernillo para ti, para ayudarte a unirte a la Iglesia Universal en todo el mundo a cantar las alabanzas del Señor mientras rezamos y cantamos juntos, unidos en el Sagrado Sacrificio de la Misa por EWTN».
San Francisco Antonio Fasani, Presbítero (Memoria)
Primera Opción
Segunda Opción
Primera Lectura
Daniel 5:1-6, 13-14, 16-17, 23-28
1El rey Baltasar dio un gran banquete a mil de sus nobles, y delante de los mil se puso a beber vino.
2Bajo el efecto del vino, Baltasar mandó traer los vasos de oro y plata que su padre, Nabucodonosor, se había llevado del Templo de Jerusalén, y que bebieran en ellos el rey, sus nobles, sus mujeres y sus concubinas.
3Cuando trajeron los vasos de oro que se habían llevado del Templo de Jerusalén, bebieron en ellos el rey, sus nobles, sus mujeres y sus concubinas.
4Bebían vino y alababan a sus dioses de oro y plata, de bronce y hierro, de madera y piedra.
5En aquel momento aparecieron unos dedos de mano humana y escribieron frente al candelabro sobre el revoque del muro del palacio real; y el rey veía la palma de la mano que iba escribiendo.
6Entonces el semblante del rey palideció y sus pensamientos le turbaron; las articulaciones de las caderas se le aflojaron y las rodillas le chocaban una contra otra.
13Entonces trajeron a Daniel ante el rey. El rey tomó la palabra y dijo a Daniel:
—¿Eres tú Daniel, uno de los deportados de Judea que trajo de Judá el rey, mi padre?
—¿Eres tú Daniel, uno de los deportados de Judea que trajo de Judá el rey, mi padre?
14He oído acerca de ti que tienes el espíritu de los dioses, y que en ti se encuentran perspicacia, inteligencia y una extraordinaria sabiduría.
16He oído acerca de ti que puedes dar interpretaciones y resolver problemas; pues bien, si logras leer lo escrito y darme a conocer su interpretación, vestirás la púrpura, llevarás al cuello un collar de oro y serás el tercero en autoridad en el reino.
17Entonces respondió Daniel y habló ante el rey:
—Queden para ti tus dones y da a otro tus regalos. Yo leeré al rey lo escrito y le daré a conocer su interpretación.
—Queden para ti tus dones y da a otro tus regalos. Yo leeré al rey lo escrito y le daré a conocer su interpretación.
23Te has alzado contra el Señor del cielo y te han traído los vasos de su Templo, y tú, tus nobles, tus mujeres y tus concubinas habéis bebido vino en ellos. Has ensalzado a dioses de plata y oro, de bronce y hierro, de madera y piedra, que ni ven, ni oyen, ni conocen; mientras que al Dios en cuyas manos está tu vida y al que pertenecen todos tus caminos no lo has glorificado.
24Por eso Él, por su parte, ha enviado la palma de esa mano que ha grabado el escrito.
25Éste es el escrito grabado: Mené, mené, tequel y parsim.
26Y la interpretación de las palabras es ésta: Mené: Dios ha contado los días de tu reinado y les ha señalado el final;
27Tequel: has sido pesado en la balanza, y se te encuentra falto de peso;
28Perés: tu reino ha sido dividido, y entregado a medos y persas.
Salmo Responsorial
Daniel 3:62-67
62Bendecid, sol y luna, al Señor,
alabadlo y ensalzadlo por los siglos.
alabadlo y ensalzadlo por los siglos.
63Bendecid, astros del cielo, al Señor,
alabadlo y ensalzadlo por los siglos.
alabadlo y ensalzadlo por los siglos.
64Bendecid, lluvia y rocío, al Señor,
alabadlo y ensalzadlo por los siglos.
alabadlo y ensalzadlo por los siglos.
65Bendecid, vientos todos, al Señor
alabadlo y ensalzadlo por los siglos.
alabadlo y ensalzadlo por los siglos.
66Bendecid, fuego y calor, al Señor,
alabadlo y ensalzadlo por los siglos.
alabadlo y ensalzadlo por los siglos.
67Bendecid, fríos y heladas, al Señor,
alabadlo y ensalzadlo por los siglos.
alabadlo y ensalzadlo por los siglos.
Evangelio
Lucas 21:12-19
12Pero antes de todas estas cosas os echarán mano y os perseguirán, entregándoos a las sinagogas y a las cárceles, llevándoos ante reyes y gobernadores por causa de mi nombre:
13esto os sucederá para dar testimonio.
14Así pues, convenceos de que no debéis tener preparado de antemano cómo os vais a defender;
15porque yo os daré palabras y sabiduría que no podrán resistir ni contradecir todos vuestros adversarios.
16Seréis entregados incluso por padres y hermanos, parientes y amigos, y matarán a algunos de vosotros,
17y seréis odiados por todos a causa de mi nombre.
18Pero ni un cabello de vuestra cabeza perecerá.
19Con vuestra perseverancia salvaréis vuestras almas.
From the Franciscan Lectionary
Primera Lectura
Isaías 61:1-3
1El Espíritu del Señor Dios está sobre mí, porque el Señor me ha ungido.
Me ha enviado para llevar la buena nueva a los pobres, a vendar los corazones rotos, anunciar la redención a los cautivos, y a los prisioneros la libertad;
Me ha enviado para llevar la buena nueva a los pobres, a vendar los corazones rotos, anunciar la redención a los cautivos, y a los prisioneros la libertad;
2para anunciar el año de gracia del Señor,
el día de venganza de nuestro Dios; a consolar a los que hacen duelo,
el día de venganza de nuestro Dios; a consolar a los que hacen duelo,
3a restaurar a los que hacen duelo en Sión
dándoles diadema en vez de ceniza, óleo de gozo en vez de luto, manto de alabanza en vez de espíritu abatido. Y se les llamará: «Encinas de justicia», «plantación del Señor», para manifestar su gloria.
dándoles diadema en vez de ceniza, óleo de gozo en vez de luto, manto de alabanza en vez de espíritu abatido. Y se les llamará: «Encinas de justicia», «plantación del Señor», para manifestar su gloria.
Salmo Responsorial
Salmo 40:2, 4, 7-11
2Esperaba confiadamente en el Señor;
Él se inclinó a mí y escuchó mi clamor.
Él se inclinó a mí y escuchó mi clamor.
4Ha puesto en mi boca un cántico nuevo,
una alabanza a nuestro Dios. Muchos, al verlo, temerán y esperarán en el Señor.
una alabanza a nuestro Dios. Muchos, al verlo, temerán y esperarán en el Señor.
7No quisiste sacrificio ni ofrenda,
pero me abriste el oído. No pediste holocausto ni sacrificio de expiación;
pero me abriste el oído. No pediste holocausto ni sacrificio de expiación;
8entonces dije: «Aquí estoy
—como está escrito acerca de mí en el Libro—
—como está escrito acerca de mí en el Libro—
9para hacer tu voluntad, Dios mío».
Ése es mi querer, pues llevo tu Ley dentro de mí.
Ése es mi querer, pues llevo tu Ley dentro de mí.
10He anunciado la justicia en la gran asamblea;
no he cerrado mis labios, Señor, Tú lo sabes bien.
no he cerrado mis labios, Señor, Tú lo sabes bien.
11No he escondido tu justicia dentro de mi corazón;
he proclamado tu fidelidad y tu salvación, no he ocultado tu bondad y tu lealtad a la gran asamblea.
he proclamado tu fidelidad y tu salvación, no he ocultado tu bondad y tu lealtad a la gran asamblea.
Evangelio
Mateo 5:13-16
13»Vosotros sois la sal de la tierra. Pero si la sal se vuelve sosa ¿con qué se salará? No vale más que para tirarla fuera y que la pisotee la gente.
14»Vosotros sois la luz del mundo. No puede ocultarse una ciudad situada en lo alto de un monte;
15ni se enciende una luz para ponerla debajo de un celemín, sino sobre un candelero para que alumbre a todos los de la casa.
16Alumbre así vuestra luz ante los hombres, para que vean vuestras buenas obras y glorifiquen a vuestro Padre, que está en los cielos.
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