Misa Diaria y Lecturas
¿No puede asistir a la Santa Misa? EWTN le ofrece las lecturas del día para permitirle seguir la Misa diaria en su transmisión por televisión. Las lecturas también son ideales para hallar tiempo durante el día para la reflexión espiritual. Escuche, vea o lea desde la comodidad de su hogar. Esta página incluye las lecturas del día y videos en línea, un recurso para todo el que desee vivir la vida de fe que agrada a nuestro Señor.
Miércoles 28 de noviembre de 2018
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Con textos en español y latín, la Guía para la Misa Global Televisada te guía a lo largo de la Misa diaria que ofrecemos en EWTN.
El Padre Joseph Mary Wolfe dice: «Hemos integrado este pequeño cuadernillo para ti, para ayudarte a unirte a la Iglesia Universal en todo el mundo a cantar las alabanzas del Señor mientras rezamos y cantamos juntos, unidos en el Sagrado Sacrificio de la Misa por EWTN».
Santiago de la Marca, Presbítero (Memoria Libre)
Primera Opción
Segunda Opción
Primera Lectura
Apocalipsis 15:1-4
1Vi en el cielo otro signo grande y admirable: siete ángeles que tenían siete plagas, las últimas, porque en ellas culmina la ira de Dios.
2Vi también como un mar de cristal mezclado con fuego, y a los que vencieron a la bestia y a su imagen y al número de su nombre, que estaban de pie sobre el mar de cristal llevando las cítaras de Dios.
3Y cantaban el cántico de Moisés, siervo de Dios, y el cántico del Cordero:
«¡Grandes y admirables son tus obras, Señor, Dios omnipotente! ¡Justos y verdaderos tus caminos, Rey de las naciones!
«¡Grandes y admirables son tus obras, Señor, Dios omnipotente! ¡Justos y verdaderos tus caminos, Rey de las naciones!
4¿Quién no temerá, Señor,
y glorificará tu nombre? Porque sólo Tú eres Santo, porque todas las naciones vendrán y se postrarán en tu presencia, porque tus juicios se han manifestado».
y glorificará tu nombre? Porque sólo Tú eres Santo, porque todas las naciones vendrán y se postrarán en tu presencia, porque tus juicios se han manifestado».
Salmo Responsorial
Salmo 98:1-3, 7-9
1Salmo.
Cantad al Señor un cántico nuevo porque ha hecho maravillas. Su diestra le ha salvado, su santo brazo.
Cantad al Señor un cántico nuevo porque ha hecho maravillas. Su diestra le ha salvado, su santo brazo.
2El Señor ha dado a conocer su salvación;
ha revelado su justicia a los ojos de las naciones.
ha revelado su justicia a los ojos de las naciones.
3Se acordó de su misericordia y fidelidad
con la casa de Israel. Todos los confines de la tierra han visto la salvación de nuestro Dios.
con la casa de Israel. Todos los confines de la tierra han visto la salvación de nuestro Dios.
7Brame el mar y cuanto lo llena,
el orbe y sus habitantes.
el orbe y sus habitantes.
8Aplaudan los ríos,
festejen a una las montañas
festejen a una las montañas
9ante el Señor, que ya viene a juzgar la tierra:
juzgará al orbe con justicia, y a los pueblos con rectitud.
juzgará al orbe con justicia, y a los pueblos con rectitud.
Evangelio
Lucas 21:12-19
12Pero antes de todas estas cosas os echarán mano y os perseguirán, entregándoos a las sinagogas y a las cárceles, llevándoos ante reyes y gobernadores por causa de mi nombre:
13esto os sucederá para dar testimonio.
14Así pues, convenceos de que no debéis tener preparado de antemano cómo os vais a defender;
15porque yo os daré palabras y sabiduría que no podrán resistir ni contradecir todos vuestros adversarios.
16Seréis entregados incluso por padres y hermanos, parientes y amigos, y matarán a algunos de vosotros,
17y seréis odiados por todos a causa de mi nombre.
18Pero ni un cabello de vuestra cabeza perecerá.
19Con vuestra perseverancia salvaréis vuestras almas.
From the Franciscan Lectionary
Primera Lectura
Eclesiástico 45:1-5
1que fue amado por Dios y por los hombres:
Moisés, de bendita memoria.
Moisés, de bendita memoria.
2Le hizo semejante en gloria a los santos
y le engrandeció para temor de los enemigos.
y le engrandeció para temor de los enemigos.
3Por su palabra hizo bajar los prodigios,
le glorificó ante los reyes; le dio autoridad ante su pueblo y le mostró su gloria.
le glorificó ante los reyes; le dio autoridad ante su pueblo y le mostró su gloria.
4Le santificó con fidelidad y con mansedumbre,
le eligió entre toda carne.
le eligió entre toda carne.
5Le hizo oír su voz;
le introdujo dentro de la nube.
le introdujo dentro de la nube.
6Le dio cara a cara los mandamientos,
Ley de vida y de ciencia, para enseñar su alianza a Jacob y sus decretos a Israel.
Ley de vida y de ciencia, para enseñar su alianza a Jacob y sus decretos a Israel.
Salmo Responsorial
Salmo 16:1-2, 5-8, 11
1Mictam. De David.
Guárdame, Dios mío, que me refugio en Ti.
Guárdame, Dios mío, que me refugio en Ti.
2Yo digo al Señor:
«Tú eres mi Señor. No tengo otro bien que Tú».
«Tú eres mi Señor. No tengo otro bien que Tú».
5Señor, Tú eres el lote de mi heredad y de mi copa:
Tú sostienes mi parte.
Tú sostienes mi parte.
6Me ha tocado en suerte un lote hermoso;
me agrada mi heredad.
me agrada mi heredad.
7Yo bendigo al Señor, que me aconseja;
hasta de noche mi corazón me instruye.
hasta de noche mi corazón me instruye.
8Pongo ante mí al Señor sin cesar;
con Él a mi derecha, no vacilo.
con Él a mi derecha, no vacilo.
11Me enseñas la senda de la vida,
saciedad de gozo en tu presencia, dicha perpetua a tu derecha.
saciedad de gozo en tu presencia, dicha perpetua a tu derecha.
Evangelio
Lucas 10:1-9
1Después de esto designó el Señor a otros setenta y dos, y los envió de dos en dos delante de él a toda ciudad y lugar adonde él había de ir.
2Y les decía:
—La mies es mucha, pero los obreros pocos. Rogad, por tanto, al señor de la mies que envíe obreros a su mies.
—La mies es mucha, pero los obreros pocos. Rogad, por tanto, al señor de la mies que envíe obreros a su mies.
3Id: mirad que yo os envío como corderos en medio de lobos.
4No llevéis bolsa ni alforja ni sandalias, y no saludéis a nadie por el camino.
5En la casa en que entréis decid primero: «Paz a esta casa».
6Y si allí hubiera algún hijo de la paz, descansará sobre él vuestra paz; de lo contrario, retornará a vosotros.
7Permaneced en la misma casa comiendo y bebiendo de lo que tengan, porque el que trabaja merece su salario. No vayáis de casa en casa.
8Y en la ciudad donde entréis y os reciban, comed lo que os pongan;
9curad a los enfermos que haya en ella y decidles: «El Reino de Dios está cerca de vosotros».
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